El pasado día 9 de este mes mientras ya estaba por finalizar mi jornada en el escondite acuático por estar el sol elevado y ya iluminar con dureza, veo unas garzas mora en dirección a donde debía salir fuera del agua, así que me vino bien para apurar el trámite y salí hacia ellas; busqué desplazarme en dirección a unos juncos que me ocultaban de su vista para no alarmarlas demasiado. Luego me asomé lentamente con el escondite entre la vegetación y una de las garzas me toleró bien. La otra estaba como a 50 metros y se ve en una de las fotos al fondo y fuera de foco.
Pero no pasó mucho tiempo y cuando trataba de acercarme más a la garza cercana a la otra justo se le ocurre volar en mi dirección, lo que fue bueno a pesar de no tener los parámetros correctos para tomarla en vuelo y la luz fuerte de costado, se alcanza a ver la magnificencia de su vuelo y su enorme envergadura alar. Lo malo es que esta garza hizo que se volara la otra que tenía como modelo prometedor para fotos aún más cercanas. Ambas salieron en la otra dirección riñendo en vuelo.
Este viernes intenté acercarme a unas pero huyeron, trataré de poder fotografiarlas en esta semana si el tiempo lo permite, hay varias de ellas en el sector de la laguna de Monte que estoy visitando últimamente.